sábado, 9 de mayo de 2020

SAVONAROLA Y LAS BUENAS INTENCIONES DE PUTIN

SAVONAROLA Y LAS BUENAS INTENCIONES DE PUTIN



https://www.youtube.com/watch?v=tIqHVSfUhmw&fbclid=IwAR1-WhcPntIwGsJKD6_9Z7kZb-a8FfaxhPAmTHU4ijJ2kRPrYCYbw2Q6dLI

Juan Manuel Soaje Pinto entrevista al Dr. Antonio Caponnetto, Pensador Católico, Poeta, escritor y Director de la Revista Cabildo, con quien analiza la situa...

Por la grata y sacrificada labor del forista Hernando Nieto ha llegado a mí el reciente reportaje efectuado al emblemático nacionalista güelfo Caponnetto, entrevistado por el integrante del partido de Salbuchi, Soaje Pintos, en consuetidinaria labor en el regiminoso canal TLV1. El tema a tratar es, como es de imaginar, el asunto de la pandemia y la cuarentena aplicada en la Argentina y en otros países. Mientras que Soaje Pintos, en consonancia con sus colaboradores Salvucci y Brodolino, reputa que no hay pandemia pues los hospitales están vacíos (ello no sería para él gracias a la cuarentena), Caponnetto en cambio como una especie de nuevo Savonarola se enardece con el papa Bergoglio y el obispado argentino porque en vez de sublevarse en contra del poder político cierran las iglesias a los fieles impidiendo la realización de misas y otras ceremonias. Por lo que invita en una sublevación colectiva a salir de la cuarentena y abrir por la fuerza los templos. Al respecto no queda claro en él si esto sería porque al no haber pandemia, tal como dice su interlocutor, no se correría peligro alguno al salir de casa o si en cambio la hay y el único remedio posible es la celebración religiosa por la que Dios como retribución la fulminaría con un rayo prodigioso. En cualquier caso llama poderosamente la atención el vuelco que el aludido Caponnetto ha dado en relación a la Iglesia católica respecto de la cual reputa ahora que habría en su seno un papa usurpador por lo que adhiere al sedevacantismo. Cosa que en cambio no hiciera con el papa anterior quien pactara nuestra entrega en la guerra de Malvinas y el retorno a la democracia, al cual a pesar de ello le reconocía en cambio autoridad. Yo no veo por qué un cierre provisorio de iglesias debido a fuerza mayor sería más grave que haber inducido nuestra rendición en una guerra contra un hereje y haber terminado padeciendo por décadas enteras su sistema siniestro. Pero todo esto debe entenderse en lo que manifiesta, un poco en sorna y en serio, siguiéndolo al notorio rusófilo jesuita Sáenz, en el sentido de que si antes, con la revelación de Fátima, debíamos rezar por las buenas intenciones del papa y la conversión de Rusia, ahora cien años más tarde lo tendríamos que hacer por la conversión del papa y por las buenas intenciones de Putin. Esto cuadra perfectamente con la estrategia política del güelfismo nacionalista, una secta cuasimasónica que existe en nuestro medio y que, si bien minoritaria en cuanto a integrantes, tiene influjos en sectores del clero y las fuerzas armadas así como actualmetne en el sindicalismo peronista. En 1955 dicha secta, enemistada con Perón, actuó en su derrocamiento a través de la figura de Lonardi. Luego se fue reconciliando con el peronismo en la idea de poder heredar dicho movimiento tras la muerte de su lider. Ello estuvo presente en la Revolución Argentina de 1966 cuando, a través del sector militar azul, arribara a acuerdos con el sindicalismo peronista al cual se le entregaron las obras sociales. En 1989, a través del movimiento carapintada de Seineldin, logró ponerlo a Menem en el poder y ahora repite su línea a nivel internacional apoyando a sectores republicanos de los EEUU y a la figura de Putin en Rusia buscando a partir de allí conquistar un espacio de poder. Si Wojtila apostaba al movimiento republicano de Bush (quien estuvo a punto de convertirse al catolicismo) en consonancia con el cristiano recuperado Putin, en cambio la línea actual de Bergoglio se vuelca más hacia los demócratas estilo Obama y la unión Europea. Recordemos al respecto que Caponnetto desde la revista Cabildo que dirigía condenó los atentados del 11S e impetró por una participación argentina en la invasión a Afganistán lamentándose que hubiera sido difícil por no contar con fuerzas armadas bien pertrechadas. Eso es todo, y la cantinela a lo savonarola la dejamos para los tontos que la puedan digerir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario