martes, 3 de mayo de 2011

¡GLORIA AL HÉROE!


No han pasado ni 48 horas de la muerte del ‘guerrero de Dios’ (son palabras del líder de Hamas) que ya la prensa venal, junto a una serie de comunicadores a sueldo, se ha encargado de emponzoñar su figura hasta poniendo en duda que realmente hubiese existido*.
Ya decía Carl Schmitt que en política hay dos tipos de personas: los amigos y enemigos. Y al respecto, en tanto la guerra es además psicológica, existen también dos tipos de discursos diferentes, uno para los amigos y otro para los enemigos. Y esto Norteamérica, que es una potencia política, lo ha venido aplicado desde su misma existencia. Al amigo en este caso se lo entusiasma con el discurso relativo a la muerte de Bin Laden así como antes se lo escandalizara con las muertes acontecidas en los atentados del 11S y al enemigo, que agrupa a ese vasto contexto de personas que no quieren de ninguna manera a los EEUU, en cambio se lo desmoraliza convenciéndolo de que no existe en la tierra un poder suficiente para derrotarlo y menos aun alguien que lo haya podido hacer con escasez de recursos como en el 11S en donde se invirtieron nada más de 500.000 dólares y se inmolaron apenas 19 mártires para producir la primer catástrofe militar de grandes proporciones en territorio yanqui. A ese enemigo hay que convencerlo por lo tanto de que no es cierto lo que Bin Laden decía de que se trataba de un tigre de papel y que en cambio todo fue un montaje hecho por ellos mismos en tanto son los únicos con capacidad suficiente como para propinarse un daño semejante. Y así como el 11S se puso el pasaporte intacto de M. Atta entre las ruinas de uno de los aviones que impactó en las torres a fin de que se pudiese decir que fue un montaje, ahora tiran al mar la salma del mártir para que esas mismas personas duden del hecho y que se diga o que no existió nunca alguien con capacidad de vencerlos o que por esa misma razón ya estaba muerto; total a los miles de imperialistas que salieron a las calles ya los entusiasmaron con la verdad, ahora de lo que se trata una vez más es de desalentar a los enemigos con la mentira que varios crédulos o maliciosos se encargarán de difundir especialmente. Y ello es porque no quieren un Che Guevara fundamentalista, sino un vulgar agente de la CIA al cual no se pueda venerar.
A tales periodistas venales que han dicho tantas veces que fue agente de tal organización habría que pedirles que de una vez por todas que se decidan a presentarnos pruebas de ello. Los más serios analistas como Paul Bergen, que fue uno de los pocos que lo entrevistara en vida, lo rechaza rotundamente por una razón similar agregando también que Bin Laden en plena guerra de Afganistán ya se manifestaba en contra de Norteamérica.
¡Qué estúpida debe haber sido entonces la CIA para haber financiado a un antiyanqui! Pero su estupidez al parecer continuó más tarde. En 1993 la CIA, que aparentemente es adepta al masoquismo y la autoflagelación, siempre a través de tal agente produjo el operativo Halcón Negro en Mogadiscio que significó la más humillante derrota de los norteamericanos de toda su historia por lo que el que la llevó a cabo pudo manifestar que destruir al imperio norteamericano es más fácil que hacerlo con el ruso, cosa que había hecho antes en Afganistán. Basta tan sólo producirle mil guerras para desgastarlo. Así fue como la CIA, contando siempre con la colaboración de tal agente, produjo el famoso 11S años más tarde con resultados altamente halagadores para tal organización que, como recordamos una vez más, es masoquista. Antes de esa fecha EEUU era la potencia universal sin rivales de ningún tipo, al menos de acuerdo a los que nos pintaban los panelistas de tal organización de todas las tendencias, pero después se demostró de una incompetencia sin límites. No ha sido capaz ni siquiera con la alianza de 43 naciones de derrotar a una simple banda armada en Afganistán a pesar de haber empleado 10 años para ello. Las guerras se les fueron sumando de a poco, Irak, Pakistán, Somalia, Yemen, Magreb, etc. y si seguimos llegamos a las mil que nos prometía el mártir. Y los resultados hoy están a la vista aun en el terreno que más les interesa a los modernos. Antes del 11S el oro costaba 300 dólares la onza hoy vale casi 1.600. EEUU era el país acreedor del mundo entero, hoy le debe a todos y si a China se le ocurriera desprenderse de sus reservas en dólares en pocos días se derrumba el imperio norteamericano y por extensión también el europeo que también luego de esa fecha ha comenzado su rumbo descendente por haberse asociado a las aventuras norteamericanas . Y podríamos seguir por lo que la consecuencia a recabar de todo esto es la siguiente: o la CIA es estúpida o nosotros no somos lo suficientemente inteligentes como para comprender sus planes o también, lo que resulta más convincente, que sea la misma CIA la que se encarga a través de una falange de asalariados o idiotas útiles de difundir campañas de desprestigio hacia la única fuerza que realmente los está derrotando.
Hoy ante esta muerte queremos decir que Bin Laden fue un verdadero mártir. Perteneciente a una familia de multimillonarios no quiso ser como su padre amigo de la familia Bush, sino derrotar al gran Satán, el mismo que diera cuenta a través de sus esbirros nativos de su maestro Sayid Qtub. Su concepción era la de un mundo en el cual lo sagrado primara sobre lo profano y la vida fuese concebida en función de una dimensión trascendente. Y como además de mártir fue un gran estratega comprendió que para derrotar a ese imperio de perversión el primer paso consistía en eliminar al falso enemigo que en los bastidores le daba la mano. Fue así como estuvo entre aquellos que integrara la Legión Árabe que batió al imperio soviético en Afganistán. Lo demás lo hemos dicho en el párrafo anterior, su organización fue la única que logró producir una verdadera derrota al imperio norteamericano y su muerte de ninguna manera significa un menoscabo a dicha lucha. Es cuestión solamente ahora de llevar a cabo la batalla propagandística contra aquellos que empeñados en defender al imperio norteamericano, a veces ocultando sus verdaderas intenciones, quieren desmerecer al único que lo ha podido derrotar.
¡Gloria al héroe!

• Es de destacar que esta actitud de duda razonable sustentada por el Movimiento talibán que exige mayores evidencias debido a que varias veces se inventaron muertes de combatientes por razones propagandistas no tienen nada que ver con las de aquellos que en cambio lo sostienen basados en la inexistencia de Al Qaeda y Bin Laden, sugestión ésta creada especialmente por la CIA.

CENTRO EVOLIANO DE AMÉRICA

2 comentarios:

  1. a pesar de los argumentos que usted expone sigue habiendo mucha gente que duda que osama haya de hecho existido
    ya veremos en un par de años q tiene para decir

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  2. Efectivamente la acción del régimen es sumamente sutil como para generar dudas entre las filas enemigas de ellos. Por ejemplo por cuál razón si se quería convencer qeu Bin Laden fue muerto se tiró al océano el cadáver y no se lo exhibió en público pues con las deformaciones que tenía el cadáver era posible hacer pasar a cualquier como tal? ES indudable que se lo hizo para sembrar la duda respecto de su existencia.

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