viernes, 24 de abril de 2020

LA REDUCTIO AD GATES

LA REDUCTIO AD GATES 

La imagen puede contener: 2 personas, barba

Leonidas Savin, quien aparece en la foto junto a Dugin, es estrecho colaborador del movimiento euroasiático y estuvo en Brasil tiempo atrás en representación de éste participando de un caricaturesco encuentro evoliano. Acotemos que se trataba en ese caso de un Evola usado para fines inconfesables por la FSB, el servicio de inteligencia de Moscú, a fin de fingirse de derecha y no zurdo como siempre fue tal tiranía. Mientras su jefe de sección se dedica a divagar filosóficamente en diferentes notas sobre la pandemia, luego de haber dicho en su momento que fue Soros el que la gestó y que esto por reacción produciría el triunfo de la gloriosa Rusia que nos implantaría el universo multipolar ante el irreversible colapso de la globalización, sucedió que este festival de delirio se tuvo que coartar cuando el maléfico virus también empezó a atacar a los rusos y su líder Putin, para desazón del Sr. Dugin, en vez de ponerse a la cabeza de la epopeya, tal como reclamaba, se recluyó en un bunker misterioso para evitar contagiarse. Fue así que para sortear tal imprevista parálisis y divague, su escudero Slavin, que al parecer ha podido mantenerse mejor en sus cabales, saca una nota pretendidamente científica que retoma el espíritu de la antigua reductio ad Soros, pero referido esta vez a Gates respecto del cual da como seguro que fue el que lanzó la pandemia para luego vacunarnos con un microchip con el cual nos controlaría a todos convirtiéndonos en zombies de la antes aludida globalización, por lo que deberíamos hacer una urgente bambolla para que el mesías Putin salga de su bunker y se ponga a la cabeza de esta lucha y nos libere de tanto mal. 
Tal como vemos ni siquiera en medio de esta tragedia el imperialismo ruso ha cesado en su acción pertinaz por destruir nuestras últimas defensas y hacerse del poder en el mundo aun a costa de lograr imponernos la idea de que debemos rechazar el único medio efectivo que existe para eliminar una enfermedad. Recordemos al respecto cómo los antiguos mongoles cuando querían conquistar una ciudad lanzaban contra ella cadáveres infectados de peste bubónica, el procemiento de los nuevos bárbaros es el hackeo y la acción por desarmar hasta la última de nuestras defensas.


jueves, 9 de abril de 2020

FEMINISMO Y CUARENTENA

FEMINISMO Y CUARENTENA


Foto aparecida en una publicación feminista por la que se trataba de graficar la actual esclavitud en la que habría vuelto a incurrir la mujer.

Es indudable que quienes más rechazan hoy la cuarentena son las feministas, es decir aquellas mujeres que, reputándose liberadas (en realidad esclavas encadenadas a sus impulsos más bajos), repudian aquello que es esencial en su función que es la atención del hogar (el oikos) y la administración del mismo (oikonomía), base esencial de la familia en un ámbito en donde el que concurría al mundo social y al político era principalmente el hombre varón. Habiendo decaído éste en sucesivos procesos subversivos que dieron cabida al mundo moderno, ha sido la mujer y su espíritu desviado aquel que ha terminado informando el orden social primero y el político después. Fue por ello que, en razón de tal desvío, la economía, ciencia inferior y subordinada a la política, ha pasado a ser el factor determinante en la esfera social. Y si bien pueden haber sido hombres varones quienes asumieron la función de mando, en razón de este decaimiento acontecido, su espíritu ha sido siempre el de la mujer desviada y sublevada. Pero ha sucedido esta vez que la providencia a través de un virus ha hecho retornar al hogar a la mujer y que fuera la política aquello que encuadrara a la economía obligándola a detener su ritmo desaforado y compulsivo por el que se destruía el medio ambiente. Pero todo esto no será pacífico ni sin dolor. Habrá muchas mujeres que protestarán por tal castigo hogareño aludiendo a la violencia machista, es decir la producida por un hombre varón al que se lo ha despojado de su dimensión espiritual al convertírselo en poco menos que un zángano. Del mismo modo que habrá economistas liberales varones que reclamarán por suspender la cuarentena ya que la economía, es decir el que es para ellos el destino del hombre, crepita y corre los mismos peligros en los que hoy se encuentra la mujer aprisionada en el hogar.

domingo, 5 de abril de 2020

¿Por qué al hombre moderno le es tan incómodo el confinamiento?, Guillermo Fernández González (España)


¿Por qué al hombre moderno le es tan incómodo el confinamiento?




Tras la ya declarada oficialmente pandemia del COVID-19,muchos gobiernos están adoptando medidas de confinamiento forzoso para evitar la expansión del virus, no obstante aparte de la mortalidad y las cifras de infectados, las "políticas de contención" están teniendo un efecto colateral no esperado que aunque haya pasado desapercibido para los Mass Media, resulta muy interesante analizarlo.


La insoportabilidad de la modernidad sin alienaciones
Suspendidos actos deportivos,y separado el hombre moderno de poder ostentar de logros materiales pasajeros, el confinamiento se convierte en un ejercicio súmamente complicado de supervivencia para el hombre moderno, en primer lugar porque ha de asumir la levedad de su existencia, su fugacidad en este mundo y como el dinero queda relegado a un segundo plano, hecho que es en sí para una persona que ha rendido culto al oro como "modus vivendi" un trauma.

El síndrome del esclavo del trabajo y la obsesión por el hedonismo
Cuando el hombre moderno se enfrenta a una situación pseudo-heremítica comienza a hacer aguas, ya que uno de los peores enemigos del hombre moderno,es este mismo, su vacío interior que antes se ocupaba con ostentosos logros en redes sociales y halardes de logros laborales y viajes se ve truncado y se debe de enfrentar a su propio vacío que permaneció cubierto parcialmente por todo tipo de alienaciones, no es de extrañar que en muchos casos el hombre moderno experimente neurosis y hasta eche de menos volver a su "rutina laboral" de la cual en una situación normal se quejaría y ansiaría las vacaciones.

Otra de las flaquezas del hombre moderno, actualmente es su hedonismo endémico, y es que el deporte que fue antaño un ejercicio noble y con un profundo sentido espiritual, actualmente se ha mercantilizado o convertido directamente en ostentación de hedonismo como consecuencia de la pansexualización masiva del globalismo. El shock pues puede ser traumático por eso vemos a "runners" en situaciones ridículas, intentando correr "clandestinamente" con el fin de seguir saciando su ego. Ya que el sentido de su existencia espiritual es nulo y lo han sustituido por un culto al cuerpo del que han hecho centro de su reputación social. Esta reputación necesita la aprobación constante a modo de limosna.


En definitiva, el hombre moderno occidental ha dado muestras que es un "gigante con pies de barro" en el caso de España han bastado 20 días de confinamiento y con internet y aún sin racionamiento se ven síntomas de personas profundamente desquiciadas, las cuales no tienen inquietud por aprovechar el tiempo aprendiendo y que al menos en algunos casos han experimentado shocks, y es que el peor enemigo del hombre moderno es, él mismo, solo si este se reencuentra con su espiritualidad descubrirá la futilidad de las cosas materiales y por consiguiente podrá valorar la trascendencia espiritual de su existencia, mientras que eso no pase, solo podremos apreciar a un hombre desnudo ante un espejo que se ruboriza e intenta engañar a imagen y semejanza del cuento del "Emperador desnudo"


Lo curioso de este estado de cosas, es que no hemos ni llegado al límite real de lo que puede ser un confinamiento real y calificándolo real refiriéndome con ello al confinamiento en toda su crudeza,sin internet con cortes de agua y luz y sin televisión alienante. Sin embargo las antaño "patas del gigante" son tan frágiles que aún con unas "privaciones" no esenciales, la moral colectiva cae estrepitósamente, ya que el hombre moderno se encuentra en una situación similar a la del famoso "Síndrome de Estocolmo" por lo tanto siente un insano amor a todo aquello que daña su esencia espiritual y hasta una adicción.


Concluyendo este texto, no hay que olvidar que lejos de ser una situación desesperada, el hombre desde tiempos de la edad media ya se enfrentó a asedios prolongados y cercos que duraban meses y años, lejos de venirse abajo o abatirse la moral muchas veces sus fortalezas espirituales reforzaban su capacidad de resistencia, desgraciadamente vemos como en el caso de España 20 días de confinamiento han bastado para dejar al desnudo todas las flaquezas inseguridades e hipocresías del hombre moderno y por consiguiente en desmentir su supuesta fortaleza, la cual solo se manifiesta en guerras lejanas que salen por la televisión con soldados pagados con sus impuestos a modo de mercenarios y como meros espectadores pasivos de un "espectáculo" a modo de producción de Hollywood.


Guillermo Fernández González

sábado, 4 de abril de 2020

La Pandemia del coronavirus, una oportunidad de reflexión, por Francismo Galarza

La Pandemia del coronavirus, una oportunidad de reflexión



Mucho se ha escrito y se seguirá escribiendo sobre el coronavirus (en adelante “CV-19”), su impacto en la salud pública, la economía, entre otros, y aquí quisiéramos aportar algunas consideraciones diferentes que podrían dar un punto de vista complementario, y desde otro punto de vista.

Esta pandemia que surgió sin aviso previo, en apenas pocos meses ha logrado que, el hombre contemporáneo haga un alto significativo en su agitada vida postmoderna. Cada país afectado ha tomado las medidas que considera pertinentes como no salir de casa, no viajar, no interactuar en grandes grupos, incrementar la higiene personal, cerrar las fronteras parcial o totalmente, entre otras semejantes, casi como a contrapelo de todo lo que le gusta y hace cotidianamente la sociedad actual. Llama la atención, entre otros ejemplos, que la Unión Europea prácticamente no ha tomado medida alguna como tal, sino que cada país ha decidido por su cuenta cómo enfrentar el brote del CV-19.

La gente en sus casas, las ciudades luciendo mayormente vacías, nos recuerdan un poco lo que debió haber sido vivir antes de la electricidad. Las actividades concluían con la llegada de la noche, y todo quedaba mayormente en calma. Pues parece que de cierto modo, la actual situación produce un efecto parecido, aunque no solo de noche. El CV-19 se puede tomar como una oportunidad única, para todos, de ver con una luz diferente al interior de cada quien, el significado de su vida, qué es valioso y qué no, desde luego, qué cambios hacer, y mejorar en lo posible, no dejándose arrastrar por la inercia que cada uno llevaba en su vida particular tratando de recuperar lo antes posible su anterior y agitado estilo de vida.

Esta sensible reducción en casi todas las actividades que tanto valora la sociedad, podrían verse definitivamente afectadas si esta pandemia dura unos pocos meses mas, lo cual parece factible, lo que desencadenará otra serie de cambios y situaciones que, como ya se ha explicado en algunos artículos de la Agencia Kali Yuga y/o el Centro Evoliano de América, ponen en evidencia la fragilidad del mundo postmoderno, y mas aun, su falta de sentido en todos los aspectos. Al parecer, la humanidad va a tener que encontrar una forma de vivir menos orientada al consumo y la agitación descontrolada. Desde que inició el siglo XXI los vientos de cambio han sido continuos, y al parecer al mundo postmoderno solo lo sostiene una ligera bolsa de aire caliente.

Si a la actual situación le sumamos la gran cantidad de problemas de viabilidad y sostenibilidad que ya venía arrastrando la sociedad en su conjunto desde hace algunas décadas de forma evidente, esta pandemia, bien puede ser vista como una especie de aviso para toda la humanidad, no por nada vivimos al final del Kali yuga, y hay que tratar de encontrar el significado profundo que esto tiene. A lo largo de la historia se han dado epidemias (varios países) o pandemias (muchos países o todos, si nos ajustamos a la etimología), como la viruela, el sarampión, tifoidea, cólera, desde luego la peste negra, la gripe española o mas recientemente la del H1N1 de 2009, pero todas estas afectaron o algún país o conjunto de países, incluso abarcaron parcialmente o todo un continente, pero rara vez al mismo tiempo con la misma intensidad en todos los lugares afectados. El CV-19 parece que cumple exacto el ´termino etimológico de pandemia, en todos los países, o todo el mundo, con excepción de los polos, donde no vive prácticamente nadie. Además, es la 1ra que podemos ver literalmente como se desarrolla en tiempo real.

Esta pandemia parece señalar algo mas; parece que quiere hacer ver o anticipar a la humanidad una especie de destino común, incluso podría ser solo el primer evento de varios, de tipo mundial.

Tendría cierto sentido, si consideramos que la postmodernidad y todo lo que implica es un cáncer que cubre casi la totalidad del mundo, y decimos casi, porque siempre habrá personas y grupos de personas que serán la excepción a esta aplanadora que corrompe todo lo que toca.

El CV-19 se trata de un evento de alcance mundial proveniente del reino de lo microscópico. Quizás existan próximos eventos provenientes de otras instancias más visibles, ya sean de la propia Naturaleza en su sentido más amplio, o por acción del ser humano, y como en el caso actual, tomen a la postmodernidad totalmente por sorpresa.

Dependiendo de lo extensa y seria que termine siendo esta pandemia, las consecuencias tendrán alcances poco discernibles por ahora. Lo importante es que la humanidad se dé cuenta al menos de que mucho de lo que tanto valora y aprecia, no tiene mas que un valor contingente, y mucho de lo que sí es verdaderamente importante, se le ha olvidado por completo o casi. Es una gran oportunidad para hacer un alto al interior de cada quien, hacer un serio examen de consciencia y cambiar de prioridades en la vida.





Francisco Galarza

Abril de 2020.