viernes, 9 de agosto de 2013

METAFÍSICA DE LA GUERRA

LA  GUERRA  NUESTRA  Y  LA  DE  LOS  OTROS

      

En su tratado “ De la guerra” que fue libro prácticamente obligatorio en las academias militares durante el siglo XIX y hasta la primer guerra mundial, Clausewitz, militar prusiano, define a la guerra como el conjunto de las acciones que se llevan a cabo para doblegar la voluntad del enemigo. Lo hace desde un punto de vista racionalista y técnico.
    Pero desde el punto de vista tradicional las cosas son totalmente distintas. Se distingue entre la gran guerra santa y la pequeña guerra santa. La primera es la que se libra contra el enemigo interior, la segunda contra el enemigo exterior. En la gran guerra santa el hombre debe doblegar a las fuerzas inferiores que anidan en él. Y es la más difícil. La otra, la pequeña guerra santa aunque parezca lo contrario, es la más fácil. Ahora bien, como nos lo  expresa Evola ambas se vinculan, y éstas son sus palabras: “La gran guerra santa se vincula a la pequeña guerra santa así como el alma lo hace con el cuerpo, y es fundamental para la comprensión de la ascesis heroica o vía de la acción, comprender la situación en la que las dos cosas se convierten en una sola, convirtiéndose la pequeña guerra santa en el medio gracias al cual se actualiza la gran guerra santa, y viceversa…”
    Esto es fundamental para comprender la esencia de las guerras actuales. Por un  lado la yihad de los fundamentalistas islámicos, es decir la unidad del cuerpo y el alma, de las dos guerras, la grande y la pequeña. Por el lado de los modernos una guerra corporal, física, material, tecnológica, desprovista de alma y de espíritu.  Y esta es la superioridad de la guerra santa, cuenta con armas invencibles porque el espíritu es superior y la voluntad de quienes lo llevan no puede ser doblegada.
     ¿Conoce alguien a persona alguna que en estos tiempos ofrenda su vida o esté dispuesta a hacerlo  invocando la constitución, la democracia  o los derechos humanos?
     Por ese motivo fracasarán las tentativas yanquis de organizar ejércitos mercenarios como están haciendo en Irak y Afganistán después de 12 años de guerra. Únicamente les quedará la fuerza bruta de la tecnología como son los drones, pero ésa también será vencida. Napoleón que entendía mucho de cuestiones bélicas dijo: “ En el mundo hay dos fuerzas, la espiritual y la material; a la larga la primera vence a la segunda.”
     Llamemos también la atención sobre la gran hipocresía del mundo moderno. Mientras se predica la paz por parte de EE.UU, Unión Europea. Rusia, China, Naciones Unidas, cristianos, liberales, marxistas, el Papa y muchos otros sin exceptuar las manadas de políticos quienes en cada rebuzno nos hablan de paz y democracia, todos ellos hacen un frente común contra los únicos guerreros que hoy sostienen la causa de la Tradición.
    Y un párrafo sobre los movimientos identitarios y pseudos evolianos que asoman en Europa.  Adoptan la peor de las posiciones: miran hacia otro lado, como  el ñandú, ave corredora de nuestras pampas, que cuando tiene miedo, esconde la cabeza bajo tierra, así  no ve ni oye.

San Carlos de Bariloche, 6 de agosto del 2013.

JULIÁN  RAMÍREZ  
  





1 comentario:

Anónimo dijo...

Profesor Ghío:
si le es posible, ¿podría comentar el escrito del enlace de abajo, tomado de un sitio católico? ¿es correcta la diferenciación que se hace sobre el concepto de casta en occidente y en la India?

http://caminante-wanderer.blogspot.com.ar/2013/08/nobleza.html