jueves, 9 de marzo de 2017

ACERCA DE LAS MARCHAS DE MUJERES

ACERCA DE LAS MARCHAS DE MUJERES

Buenos Aires: Una multitudinaria marcha conmemorando el Día Internacional de la Mujer y el paro de Mujeres, con consignas contra la violencia de género. (Telam)

Un par de reflexiones que nos suscitan tales marchas y reivindicaciones feministas. Con respecto al tema de la igualdad que postula el feminismo creo yo que más que nunca se ponen en evidencia las incongruencias de tal dogma. La mujer quiere ser igual al hombre (excluyo en esta afirmación a los feminismos supremacistas que rechazan tal postura y que no eran los que primaban en sus consignas en las distintas marchas de ayer) pero a pesar de ello, cuando logra sus objetivos, pretende privilegios especiales que contrastan con tal dogma sostenido. Ya hemos visto cómo, una vez que ha alcanzado a tener el mismo derecho que el hombre en materia política, ha logrado imponer desigualdades como la de poder tener un cupo obligatorio de representantes en los parlamentos, cosa ésta denegada al hombre varón. Sería por ley una cosa prohibida un parlamento compuesto solamente por varones y no así uno de mujeres. De la misma manera en materia sexual, en tanto la mujer se ha convertido en objeto de deseo irrefrenable (cosa ésta suscitada cada vez más por los medios y por las mismas mujeres con sus desnudeces espontáneas) una famosa ley de acoso exige al hombre imputado la inversión de la prueba. Es decir que éste debe demostrar que no acosó a la mujer y no ésta que fue acosada. Es decir una nueva desigualdad obtenida luego de hacer triunfar la 'igualdad de derechos'.
Pero lo más insólito es el problema de la violencia machista. Hemos presenciado en estos tiempos imágenes simultáneas de mujeres repletas de golpes en la cara y al mismo tiempo de otras que practican el boxeo de manera por lo más virulenta ya que también en esto, en el hecho de golpear se han convertido en iguales a los hombres. Nos preguntamos al respecto ¿Qué pasa cuando es una mujer boxeadora la que golpea al marido que no lo es? Lo más probable es que en este caso el machismo tenga que ver con la vergüenza de no concurrir a una comisaría para denunciar a la golpeadora. Pues si bien somos todos iguales resultaría ridículo todavía ahora (un viejo resabio de machismo) hablar del hombre varón golpeado. Pero además nos toparíamos con el dogma del varón violento y de la mujer que es víctima obligada. Nuevamente la igualdad conduce a una desigualdad. Y creo yo, en nombre esta vez de tal principio, que hay muchos hombres golpeados que no se animan a denunciar su situación.
Por último leemos que el hombre mujer ha resuelto hacer huelga en las tareas domésticas en el día de ayer y exige que en igualdad el hombre varón vaya a lavar los platos. ¿Por qué sólo él tiene que recibir dinero por lo que hace, y por qué sólo él puede hacer huelga? He aquí pues la degradación de la mujer respecto de lo cual parece no darse cuenta. Una de sus grandezas es que realiza una labor libre no determinada por la necesidad cual es atender el hogar y hacerlo sin horario y sin dinero por lo que se la retribuya. Su acción no es trabajo sino vocación que obedece a su naturaleza superior y más íntima y sagrada. Apartarse de la mujer verdadera es lo que hace el feminismo, un movimiento en contra de la mujer.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Trágico también es que quieren monetizar hasta las labores de casa. Empujan su mentalidad dineraria hasta lo más íntimo de nuestros hogares. No es tanto tema de sexos, sino de otro ataque del sistema para destruir relaciones, familias y todo grupo que se apoye, no quieren acuerdos fuera de la banca y del dinero. Y asi enfocado no lo trata casi nadie, la mayoría caen en la trampa de verlo emocionalmente de un bando u otro. Es la mentalidad monetaria que cual camello empuja su cabeza dentro de nuestras casas. El monstruo que sigue acechando.